Carta de Pompeyo

Antonio: Considero que tu oferta de doscientos cincuenta áureos por Vespasiano, el Terror de Troya, roza el insulto. Yo mismo he visto cómo mataba a dos leones con solo un gladius. Este guerrero no teme a nada en la arena. Es un asesino experto, y cada muerte supondrá los vítores de las masas y más monedas para tu bolsillo. Aunque es intrépido e invicto en la arena, sabe comportarse y nunca anhelará la libertad. Lo que tiene de despiadado lo tiene de simple. Por todo ello, no aceptaré menos de mil áureos. Por ese precio, podrás enviarlo a morir a la arena contra las adversidades que más te diviertan. Su muerte aumentará la gloria de Roma y el alborozo de las masas. La libertad nunca ha estado destinada para este hombre. Pompeyo Magno