Diario de Renée
Cazo bisontes en la zona por hacer algo. Son muy abundantes en Ocaso y las pieles se venden a un buen precio en Guardaelviento, siempre que una esté dispuesta a mancharse las manos. No le tengo la misma aversión al frío que otros colonos, en parte porque cazar en el monte me llena de paz. Tenía un pequeño campamento base en la montaña al norte, junto a los senderos, pero las presas eran más escasas cuanto más me alejaba de él y me adentraba en la nieve.
Fue entonces cuando encontré el primer bisonte muerto. A simple vista parecía que lo habían matado los lobos, pero ningún lobo que haya visto tiene unos dientes y unas garras tan grandes como para causar esas heridas. Cuando me puse a inspeccionar el cadáver, me di cuenta de que la boca del bisonte estaba cubierta de hielo, como si su aliento se hubiera congelado antes de que se ensañaran con él. Las gélidas huellas del agresor llevaban a las montañas del norte.
- Renée Marie Cartier
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