Suministros para la taberna

Elizabeth- Quince jarras de metal, tal y como me pediste. Le he dado al porteador una maza de madera y un abrigo nuevo para que pueda defenderse en el camino de vuelta. El pobre apenas salió con vida de su viaje hasta aquí; llegó con la ropa hecha jirones de tanto que lo hostigaron los redivivos. En serio, Elizabeth, tendrías que proteger mejor a los porteadores como Tapton o te acabarán robando los suministros otra vez. Ahora que los piratas han probado la calidad de mis bebidas Y le han cogido el gusto, atacarán al porteador en cuanto lo vean. -Flores