Este viaje será la prueba más dura que los guardianes del alma emprenderán jamás. Desde que nos separamos eones atrás, no nos hemos enfrentado a tal peligro. El riesgo es alto, pues si queremos ser capaces de cumplir nuestro gran propósito y proteger a la gente de Aetérnum de amenazas letales incluso para aquellos que hacen trampas con la muerte, debemos estar preparados y listos para enfrentarnos de frente a tales enemigos. ¡Solo desearía tener más tiempo!
Nuestra gran aliada, Grace, está lista; pero a veces temo que actúe por interés propio y que le falte el compromiso de aquellos que han acogido por completo nuestra bandera. La fe de Galahad le ha sustentado durante mucho tiempo, y sospecho que continuará igual. Pero los demás... son valientes y están comprometidos, pero quizá les falte la fuerza y la experiencia necesarias para alzarse victoriosos. No me cabe duda de que, algún día, serán unos guardianes del alma excelentes, pero la crisis está aquí, ahora, y debemos luchar o arriesgarnos a que nos ahogue la inminente marea de la corrupción.
Incluso más que Grace, o Galahad, o yo, hay alguien entre nosotros con la resolución y el coraje que serán clave en nuestro éxito. Alguien que comenzó su vida en esta isla tras naufragar, pero que se ha vuelto indispensable en nuestra lucha. Quizá eso sea suficiente. En todos mis años, he visto el poder de una única alma valerosa enfrentarse contra muchos, y el poder que puede tener para darle forma a la historia. Quizá con eso baste. Solo el tiempo lo dirá.